lunes, 17 de mayo de 2010

TODO EL MUNDO MIENTE



Todo el mundo miente; todos hablamos de los demás (bien y mal); todos decimos una cosa, y hacemos luego otra. Todos creemos que damos una imagen pero en realidad los demás ven otra. Todos hacemos cosas de las que luego nos arrepentimos; todos hemos sido inconscientes, insensatos, cobardes...todos.

¿De qué me sirve tener un blog personal si luego no puedo expresarme libremente? Aquí escribo lo que quiero, lo que pienso, cómo me siento. Mis estados emocionales oscilan, a Dios gracias! La paradoja es que no dejo de estar hablando sobre mis "intimidades" entre comillas porque no hablo sobre si tengo la regla ("menstruación" siempre me ha parecido una palabra horrible) sobre si he tenido sexo, si me pone tal o pascuala...hablo sobre cosas íntimas, pero no en exceso. Es dificil encontrar el equilibrio.

Este es un espacio para que tú entres, leas y pases un rato diferente, entretenido, leyendo a una que divaga mucho, con una gran imaginación, y que disfruta escribiendo (y sí, también peleándose con internet, blogger, plantillas, archivos de imagen, de sonido...) pero sobre todo es el lugar dónde cuento mis secretos...secretos que no lo son tanto, no nos engañemos.

Se trata de que seamos cómplices. ¿Sabes guardar un secreto? Pues juguemos a eso: yo te cuento algo y tú me guardas el secreto. Yo escribo algo, y tu lo disfrutas, o piensas sobre ello...

Sobre mi día de hoy...la verdad es que no merece la pena extenderme, pero podría decirse que he vuelto a tener demasiado cerca personas que mienten y hablan de los demás, mucho y mal...

Me voy a permitir la licencia de caer en eso que estoy criticando: hablar de los demás mal. En el transcurso de pocos días, diferentes personas han hablado sobre la "mania" que tenemos las personas ¿adultas? (¿los niños lo hacen?) de hablar sobre los demás...vamos lo que vulgarmente es CRITICAR.

Pero es que, los mismos que manifiestan abiertamente que no les gusta hablar de los demás...LO HACEN!
No sé qué gusto le encontramos a hablar, criticar lo mal que lo hacen los demás. Nos creemos muy coherentes, muy sensatos "digo y actuo conforme a cómo pienso" y la verdad es que no es así. ¿Cuántas parejas continuan con una relación que los tiene aburridos? ¿cuántas personas continuan en un trabajo que no sólo no les llena, sino que los tiene asqueados? Personas que se levantan cada día, para acudir a un trabajo que desempeñan con todo el hastío del mundo, sin hacer nada para cambiar la situación, y limitarse a quejarse. Personas que continuan con su pareja, por costumbre, por cariño, porque no han conocido nada más, porque no tienen ganas de vivir SU PROPIA vida.

Creo que ser coherente con uno mismo es realmente lo raro. Y no digamos si dices lo que piensas la mayoría de las veces!! "Este-a está pa yá" piensa la mayoría.
Se te etiqueta de borde, de poco simpático, de rarito...

Un mundo de hipocresía este, donde salirse de lo establecido es agotador.

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