jueves, 28 de octubre de 2010

SE ABRE EL TELÓN



"Life in technicolor" Coldplay

El ser humano no se comporta de igual modo como individuo que estando en grupo. Es como si la vida fuera un gran escenario en el que se representan muchas funciones a la vez, cada una de ellas compuesta de varios actos.

En mi trabajo hay una rotación anual. Ello implica canbiar el lugar de trabajo, tener compañeros y un encargado diferentes. Este año, no he podido llegar a la vez que todo el mundo al lugar nuevo de trabajo por estar convaleciente de la operación del mes de septiembre; lo que hizo que cuando me incorporé, los grupos estuviesen consolidados, y cada persona asumiera su rol.

Esto ha provocado que me sienta fuera de lugar, sin encajar. Soy una persona muy sociable, y acostumbro a adoptar el rol de persona alegre, bromista y quizá un poco la que tira del grupo.
Pero esta vez es diferente. La gente ya ha trabado más confianza con unos, distancia con otros; todos han asumido su papel (el bromista, el protagonista, el discreto, el que cae mal, el conflictivo, el neutral...) menos yo.

No me gusta esforzarme por caer bien, ni busco la compañía de los compañeros con desesperación. En mi trabajo pasas muchas horas solo, y la compañía a la hora del almuerzo (por ejemplo) se agradece y casi diría que se implora (los hay que lo hacen) En cambio, hay un cierto espíritu independiente y solitario en mí. Por otro lado, me irrita tener que buscar la conversación cuando sé que ello implica forzarla.

Así que he adoptado el rol que ha ido cayendo por si solo: voy a mi aire, sin marginarme en exceso. Un dificil equilibrio. ¿Por qué dificil? Porque cuando una persona se desmarca del grupo, algunos integrantes de dicho grupo (los que no piensan más allá) pueden creer que esa soledad no es aceptada, sino consecuencia de que ésa persona no cae bien o no es aceptada.

No es algo que sea el centro de mis preocupaciones, pero sí es cierto que me incomoda un poco. Me incomoda porque hay gestos, detalles que hacen que modifique mi conducta; que me frene a la hora de hacer algún comentario, o que no haga bromas por no querer sentir que la gente no me sigue. ¡Qué complicada que es la psicología de grupo!

Supongo que al fin y al cabo de lo que se trata es de convivir con un estado de desubicación pasajero.

Mientras, me gusta pensar que el trabajo no es un fin, sino un medio. Que la vida "de verdad" es aquélla en la que somos nosotros mismos los que decidimos el decorado, y los personajes. Los seres que nos dibujan sonrisas, nos sacan risas y todas las emociones que como seres humanos tenemos el privilegio de vivir, sentir y compartir.
Está claro que no somos autómatas, aunque haya quién viva como tal. Pero para mí ir a trabajar es una obligación con la que he de cumplir para poder vivir y disfrutar de mi vida.

Estos días disfruto de unas mini vacaciones (resto que me reservé de las de verano) así que cargaré las pilas para cuando vuelva. Además, me volveré a encontrar con un cambio de lugar de trabajo, y nuevos compañeros.
Así que me comportaré como libra, el horóscopo que, según los astrólogos busca el equilibrio sin cansancio; un estado que sólo puedes experimentar cuando consigues nivelar tus demonios y tus ángeles; cuando eres capaz de mantener dentro de una franja tu quietud interna. Cuando no hay picos de euforia y de angustia.

Qué lejos estoy todavía...

2 comentarios:

  1. Buenas Carme! Esas situaciones en el trabajo se viven tanto si llegas de nueva al grupo como si no. Yo llevo 11 años en mi empresa y hay veces que es así. También te digo que muchas veces lo busco yo... el estar más apartado de los chismorreos, de los cotilleos y me aíslo yo solo. Por lo general suele durar unos días de consecutivo y suele coincidir con un estado de moral bajo. Cierto es que eso es hasta que salgo de trabajar, porque una vez dada la hora de salir, salimos juntos a tomar algo o a echar una partida de poker como hoy por ejemplo. Ese equilibrio emocional del que hablas lo encuentro muchas veces y es como te digo... aislándome yo mismo... sin esperar a ser aislado.

    Besos!

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  2. Sí, yo también busco ese aislamiento, y sí, creo que también se debe a que mi estado moral no acompaña...

    Me gusta eso que dices de que buscas su equilibrio aislándote. Creo que eso se llama "una rica vida interior" y no es coña.

    No sé quién disfruta más, si tu leyéndome o yo con tus comentarios ;-))

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